Capítulo 1

¡Hola! Soy Miss Hawthorne Eaton. Aquí tenéis el primer capítulo de la historia que vamos a hacer. Seguro que a las Divergentes Mentalmente Desorientadas os encanta ^.^

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Capítulo 1 - Katniss

Me despierto sobresaltada de la cama. Aun tengo ese sabor amargo que tan bien conozco de las pesadillas. Ademas, tengo la garganta irritada. Seguro que he gritado. Ya es la tercera esta semana. Espero que empiece a dormir bien pronto, o mañana moriré ahogada de tanto gritar. Me levanto de la cama con el pijama sudoroso y me dispongo a darme una ducha. El agua esta fría y hace que me sienta mas fresca. Me visto con la ropa mas normal que tengo y bajo a desayunar. Mi hermana Prim está sentada en la mesa de la cocina, dándole vueltas con una cuchara a una taza de leche. 

Cuando me ve, levanta la mirada y sonríe.

-Buenos días, ¿Que tal has dormido? -Me pregunta todavía con esa sonrisa en la cara.

-No muy bien. Las pesadillas me atormentan.-No necesito especificar de qué tipo son, ella ya las conoce.

Vuelve a mirar su taza con la mirada perdida en la leche.

-Yo también he dormido mal.-Su sonrisa desaparece.- Katniss...-Vuelve de nuevo la cabeza hacia mí.- Tengo miedo.

Esas palabras hacen que me estremezca por dentro. Sinceramente, yo también lo tengo. 

-Ven aquí, pequeña.-Me siento en otra silla de la cocina y hago que se sienta en mi regazo. A ella se le escapa una pequeña lágrima, y se me retuerce el estómago.-Sshh... No llores, Prim. Sabes que no saldrás elegida. Es tu primer año. Solo tienes una papeleta.-Antes de que la lágrima caiga, la recojo con un dedo.-Te lo prometo.-Ya vuelve a sonreír, pero no con la misma intensidad que antes.-Venga, ahora termina el desayuno, que llegaremos tarde a clase.

-Gracias.-Se baja de mi regazo y vuelve a su taza. 

No me extraña que esté asi. Es su primera cosecha. Yo aun recuerdo mi primera cosecha. Estaba como ella, destrozada, con miles de pesadillas que me atormentaban. Pero no puedo hacer nada para evitarlo. Mañana son Es el dia de la Cosecha, y dos tributos, un chico y una chica de este Distrito serán elegidos para luchar a muerte junto con otro 22 tributos. Sólo para diversión del Capitolio. Cuanto les odio. Odio ver a mi hermana asi. 

Sin que me dé cuenta, Prim ha colocado una taza de leche enfrente de mí. Me da una sonrisa tímida.

-Muchas gracias.

Y se va. Posiblemente a vestirse. Hay que ir a clase.

Bebo rápidamente la taza, y, justo cuando la termino, baja mi madre, vestida y peinada.

-Buenos días.-Digo secamente.

-Buenos días.-Dice ella en el mismo tono.

No me llevo bien con mi madre. Es extraño, lo se, pero tengo mis razones. Cuando yo tenía 12 años, mi padre murió en una explosión en las minas, dejándonos a mi madre, a Prim y a mí sin nada que llevarnos a la boca. Mi madre entro en una profunda depresión y no hacia caso a nada ni a nadie. Ni siquiera a mi o a Prim. Se pasaba el dia y la noche tumbada en la cama, muchas veces lloraba. Sabia que no sobreviviríamos asi. Me hice cargo de mi familia a los 12 años para seguir adelante y no morirnos de hambre. Mi madre ha ido mejorando al pasar los años, pero aun asi, yo no la perdono ni tengo planes de hacerlo. 

Voy al baño a peinarme. Me hago mi característica trenza y bajo. Tenemos que ir al colegio. Prim me espera en la puerta. Tiene la camisa mal metida por la falda y parece la cola de un pato.

-Vamos, patito.-Le digo colocandosela bien.

-¡Cuak! -Dice ella entre risas.

La cojo de la mano y nos dirigimos al edificio. Está algo abandonado, pero nos sirve. Entramos y cada una se va a su clase.

-Nos vemos luego.-Le doy un beso en la frente mientras ella se despide con la mano y se aleja.

Voy a mi clase. Entro y me siento atrás del todo, para no destacar. En el colegio no soy de las populares, simplemente me considero una persona tímida y reservada. Aún así, con el paso de los años conseguí ponerme una mascara de indiferencia.

El profesor entra y empieza a explicar que mañana es el dia de la cosecha y... Desconecto. ¿Por qué nos dicen cosas que ya sabemos? Me paso la clase mirando por la ventana el bosque del Distrito 12, tan bonito, tan deseado. Esta clase me hace sentir encerrada. Sin embargo, en el bosque soy libre y es donde cazo, una cosa que me encanta. Esta tarde he quedado con Gale para cazar. Gale. Mi único y mejor amigo. El único con el que puedo ser yo misma.

La clase pasa deprisa. Salgo de esa clase que tanta claustrofobia me da. Recojo a Prim y volvemos a casa.

Cuando llegamos la comida está preparada. Como rápidamente y subo a cambiarme. Me pongo la ropa que uso para cazar y cojo la chaqueta que conservo de mi padre. Me queda grande, pero me gusta.

Salgo de casa sin hacer caso a nada ni a nadie. Amo el bosque. Ya empiezo a oler su aroma. Paso por debajo de la Alambrada. Sí, aquella que debería estar electrificada, pero que no lo está. Es las ventajas de ser el distrito mas pobre. Corro por el bosque sintiéndome libre. Recojo mi arco y mi carcaj de flechas de su escondite y me dirijo a mi punto de encuentro con Gale. Allí esta. Alto, musculoso. Con esos ojos grises,ese pelo marrón y esa piel aceitunada tan característica de La Veta. Mucha gente me pregunta si somos primos. Cuando me ve, levanta la cabeza, y sonríe.

-Hola, Catnip.-Ese no es mi nombre, mi nombre es Katniss, como la flor acuática a la que llaman saeta, pero, cuando se lo dije por primera vez, mi voz no era más que un susurro, así que creyó que le decía Catnip, la menta de gato. Aún así, me gusta.

-Hola, Gale. 

Me siento a su lado. No quiero andarme con rodeos. Voy al grano.

-Prim sigue teniendo pesadillas.

Él me mira apenado, pero con un brillo de comprensión en los ojos.

-Es su primera cosecha. Lo extraño seria que no las tuviera.

Resoplo.

-Lo sé, pero se me parte el alma verla así.

-Si pudiese hacer algo lo haría pero... -Le entiendo.

-Es inevitable.

Nos quedamos en un silencio incómodo, interrumpido por el canto de un pequeño pájaro.

-¿Vamos a cazar?

-Claro.

Nos levantamos del saliente y nos dirigimos al bosque. A medida que nos adentramos vamos yendo en mayor silencio. Gale coloca algunas trampas; los animalitos que caigan en ellas no tienen ninguna oportunidad. Distingo varios animales, pero entre ellos me llama la atención un conejo algo gordito. Perfecto. Coloco la flecha en el arco lentamente. Tenso la cuerda.

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Espero que os haya gustado. Los capítulos se publicarán cada 5 días (: